Autocuidado

El autocuidado no es un lujo, es una necesidad. Y muchas veces no requiere grandes cambios, solo una decisión diaria de parar, respirar y escucharte.
En esta sección, cada semana recibirás un consejo práctico y un pequeño reto para incorporar el autocuidado de forma real y posible en tu vida.
No necesitas más tiempo, necesitas más intención. Y aquí estaré para acompañarte paso a paso.

¡Bienvenida a tu nueva rutina de autocuidado!

Ritual de baño o ducha relajante

¿Por qué este reto?

Muchas veces la ducha o el baño son algo automático que hacemos por higiene… pero ¿y si lo convirtieras en un ritual de autocuidado?
Este reto te invita a transformar un momento cotidiano en un espacio sagrado para ti. Porque cuando cambias la intención, cambia la experiencia.

Crear un ambiente agradable, elegir conscientemente cómo quieres sentirte y darte ese tiempo sin prisa, puede ayudarte a soltar el cansancio acumulado y a reconectar contigo.

Consejo

Convierte tu baño o ducha en un momento de presencia y bienestar. Puedes preparar el espacio con pequeños detalles que te relajen, como:

• Una vela encendida

• Música suave o tu playlist favorita

• Un aceite corporal o esencia natural

• Respiraciones conscientes mientras cae el agua

• Una infusión relajante justo después

La clave está en hacerlo con atención plena: estar en el aquí y ahora, sin móvil, sin prisas. 

Reto

Esta semana, haz al menos 2 “duchas conscientes” o baños relajantes, dándoles una intención de cuidado, descanso y presencia.
Puedes hacerlo al final del día para soltar tensiones, o por la mañana para empezar con más calma.

Después, si lo deseas, acompáñalo de una infusión o una hidratación corporal lenta y consciente. Permítete disfrutar sin hacer nada más.

Journaling

¿Qué sensación te dejó este momento de cuidado personal?

Reflexiona en tu diario después de tu ritual de baño o ducha relajante.

Plantilla de journaling semanal (para descargar)
Al final de cada reto semanal, puedes descargar esta plantilla para reflexionar sobre tu experiencia. Es un espacio solo para ti, donde podrás escribir lo que has sentido, lo que has descubierto y cómo te ha ayudado este pequeño hábito a cuidarte mejor.
No necesitas escribir mucho ni “bien”, solo ser sincera contigo misma. Este diario te acompañará semana a semana en tu camino de autocuidado.

Ahora te toca a ti.
Este reto es pequeño, pero su impacto puede ser muy grande si lo haces con intención. No necesitas hacerlo perfecto, solo necesitas hacerlo.
Regálate estos minutos como una forma de decirte a ti misma: “me merezco cuidarme”.

Estoy aquí para acompañarte en el camino. ¡Ya me contarás cómo te ha ido!